
Únicos en su fabricación, absolutamente de alta calidad, legendarios y simplemente hermosos. Así se pueden describir los guardabarros hechos a mano de la empresa familiar japonesa Honjo. Fundada en Tokio en 1949, Honjo comenzó produciendo guardabarros para motocicletas y bicicletas, y desde 1985 exclusivamente para bicicletas. La más alta calidad y la pasión por la artesanía hacen que estos guardabarros sean únicos: diversas formas y tamaños, con acabado liso o martillado, fabricados en aluminio y pulidos hasta obtener un brillo intenso. Estos guardabarros son una verdadera atracción y un imprescindible para todos los amantes de los productos hechos a mano auténticos y los randonneurs clásicos.